Película: Guardianes de la Galaxia.



Parte de un top anticuado y sustituido.

Nadie conocía a los Guardianes antes de esta película, de hecho, ni los propios fans de cómics los seguían, y nadie les tenía cariño. ¿Un mapache que habla, un tronco, dos aliens y un humano y sus aventuras? Ppfffft... ridículo. Era ridículo, salvo que no lo era en absoluto. Marvel apostó arriesgado con esta película: si salía bien, su universo sería mucho más sólido, y si les salía mal... bueno, lo habían intentado. Entonces vino James Gunn, un director de segunda categoría, a demostrar que nada es imposible si apuestas todo a tus personajes.

Fui a verla en el cine por esta imagen. Algo me dijo que esta peli tenía corazón.

Guardianes se vendió como una comedia, pero no lo es, al menos no lo es completamente. Empieza con un niño en un hospital que quiere aislarse con su música: su madre se está muriendo. Ella le pide que le dé la mano, pero él no quiere, porque no está preparado para verla partir. Muere, sin que el chico le haya dado la mano, definiendo así la culpa y el trauma con un gesto. El niño se va, llorando, cuando una nave espacial le intercepta y le abduce... y lo último que oímos es el grito de auxilio del niño, que llama a su madre.


Entonces, aparece el sello de Marvel. ¿En serio esta es una película de Marvel? Joder... Ahora han pasado veintipico años, y vemos a un hombre caminar en un mundo destruido y taciturno, lleno de recuerdos que ya no existen. Llega a un edificio, oscuro, demacrado, se quita la máscara... y se pone el Walkman. Este hombre es el niño del principio. ¿Cómo le habrá afectado la muerte de su madre con los años? Mínimo, debe ser tres veces más oscuro que el Superman de DC.

Pero el hombre se pone a bailar, de forma muy sensual y divertida.


¡Jajajaja! ¿Qué te esperabas? Estas dos tonalidades, tan próximas y tan opuestas, definen el tono completo de la película: sí, es una comedia, pero abraza el drama con todas sus consecuencias. Sus personajes también sufren, y tienen pasados aterradores.

Cátedra sobre cómo hacer buenos personajes.


Esta película hace muchas cosas bien, pero la mejor son las personalidades de sus protagonistas. A Starlord, Peter, ya le hemos visto de sobra en la secuencia del principio, pero en Xandar vemos al resto: Gamora, letal, pero exagerada; Groot, fuerte pero tonto, y Rocket, enclenque, cachondo y con recursos.

Lo más importante a la hora de crear historias, o de disfrutarlas, es la interacción entre los personajes. En su choque está la salsa de cualquier película, y es imposible que puedas levantar una historia con personajes aburridos. La fórmula de Guardianes es simple, pero demoledora:
  • Pasado traumático
  • Característica distintiva
  • Visión distorsionada del mundo

Y realmente, no necesitas mucho más que eso. Cada personaje tiene un pasado traumático, y tiene una forma de gestionarlo, y eso va a decirnos cómo actúan en las situaciones malas. Su característica distintiva no es su utilidad en la historia, sino una característica de su personalidad que nadie más tenga. Rocket es un capullo, pero eso no es distintivo. Por eso, además, siempre coloca un elemento en sus planes que es absurdo, como empezar a contar desde cinco un rescate. Groot solo dice
"Yo soy Groot",
y Gunn tiene bastante talento para dotarle de mucha personalidad, aun así. Drax es literal, Gamora es una tipa dura con honor y sentido común, y Starlord es un friki con complejo de héroe.


Además de eso, cada uno tiene una idea del mundo absolutamente diferente, lo que hace que choquen constantemente.

La música, además, es un personaje más en la historia. No solo porque las canciones estén presentes durante la película (y dicho sea de paso, lo pusieran de moda), sino porque lo que dicen esas letras tiene que ver con la película, y además, todas suenan porque son reproducidas de la cinta de Peter. Si Peter no hubiera ido a por su Walkman en la cárcel, entendemos que no hubiéramos escuchado más canciones.

Su guión.


Hace tiempo publiqué un artículo en el que explico cómo hace esta película para introducirnos en su universo tan bien (clic en lo rojo). Y, si lo has leído, sabrás que no me hace mucha gracia la cantidad de exposición continua que tiene esta película.

Cuando Ronan explica su plan a la gente que ya lo conoce de sobra, o cuando el Coleccionista tiene oportunos vídeos con los que explica a los Guardianes qué son las Gemas del Infinito, e incluso un vídeo muestra a un grupo intentando controlar la gema, sabemos que James Gunn no habla a sus personajes, sino a la audiencia. Esto la primera vez puede pasar desapercibido, porque lo hace con sutileza, pero las siguientes veces te da un tortazo en la cara.


Es curioso, cómo lo único que expone es su universo, el mundo. El pasado y la personalidad de los protagonistas siempre lo sabemos mediante acciones, y como eso es lo más importante, no me enfado. La única excepción a la regla es Gamora, que expone de forma incoherente sus motivaciones, y de hecho, es el personaje más flojo hasta que llega la segunda parte. Y Yondu también es flojo, pues tan pronto está dispuesto a matar a Quill, como a perdonarle todo.

Sin embargo, no todo son quejas. Quitando la exposición, el guión de la película es muy bueno, sobre todo en los diálogos. Pequeños detalles, como que la madre diga en el primer minuto de película que el padre de Peter era un ángel de pura luz... FAAAAAAC. Lo que sí pienso es que el Estudio obligó a Gunn a meter constantes escenas de acción, porque tengo la sensación de que la persecución en la Estación Sapiencial sobra.


Sí, me gustan las pelis de superhéroes, pero no soy un adicto a la acción, si no es necesaria. Es como el típico tercer acto en el que hay una batalla contra el villano... ya, a estas alturas, me cansa. No siempre se resuelve todo a golpes, ¿sabes? La confrontación puede ser de otras maneras, como intentaron en 'Doctor Strange'. Aquí, al menos, síiiii, el tercer acto no es para nada convencional. Una pelea de naves, muy preciosa para la vista, un momento de peleas, y luego un duelo de baile.


Aunque el duelo de baile me dejara un poco descolocado y frío la primera vez que lo vi, porque joder, el villano es muy tonto, le he ido cogiendo cariño con el paso de los años.

¿Y por qué no hablamos de la genial conversación en círculo? A esto me refiero cuando digo que una comedia no debe ser realista: una comedia debe tener personajes raros de cojones, que choquen contra nuestro sentido común y nuestra forma de ver las cosas.

—Tengo parte de un plan.

—¿Qué porcentaje de un plan tienes?

—¡Tú no puedes hacer preguntas después de la que has liado en la Estación Sapiencial!

—¡Acabo de salvar a Quill!

—Hemos dejado claro que destruir la nave en la que estoy no es salvarme.
—¿Cuándo ha quedado claro?
—¡Hace tres segundos!

—No estaba escuchando, estaba pensando en mis cosas.

Simplemente brillante. El final de dicha conversación, por cierto, tiene una de esas frases que se me metieron en la cabeza y ya no van a salir:
"He vivido casi toda mi vida rodeada de mis enemigos. Estaré agradecida de morir con mis amigos" «Gamora».
Solo hay dos minutos entre el chiste de antes y esta frase, y no se siente fuera de lugar. Esta es la magia de las historias, y por eso me gustan tanto. Porque pueden hacernos reír y emocionarnos en muy poco tiempo.

Dirección y arte.



No me gustan los dibujos de Jack Kirby. Debe de ser por el trazo y el tipo de tinta, porque se ven viejos, pero todas las películas que homenajean su paleta de color me encantan visualmente. Por eso estoy seguro de que, en la mente de Jack Kirby, todo debería ser tan bonito como en esas películas.

Qué colores. Qué bien. El universo de Marvel parece muy divertido de explorar, y muy bello, todo lo contrario al nuestro. De hecho, si tengo que criticar algo a la dirección de arte es por las pintas de los malos. ¡Son todos grises! Las escenas de batalla en la Dark Aster se me hacen demasiado sombrías, y casi tengo que achicar el ojo para distinguir todo lo que ocurre. Por cierto, si esto es un Sakaariano... ¿por qué no vimos nada así en 'Thor: Ragnarok'?


Aunque algo que no podemos negar es que tiene su estilo propio y, pese a haber tantas franquicias basadas en el espacio, cuando ves algo de su universo, sabes que es del suyo. Sobre la dirección puedo decir más de lo mismo. Generalmente Gunn usa planos funcionales, aunque no suele repetirlos, y en algunos momentos se permite algún que otro uso menos usual de la cámara, como en el baile del principio, o cuando la Milano sobrevuela el cielo hacia la Estación Sapiencial...


... o cuando decide que Rocket juegue unos segundos al 'Call of Duty'.


¿Y por qué nadie le dedica un espacio a su Banda Sonora Original? Todo el mundo está que no caga con sus canciones, que si Awesome Mix por un lado, que si Awesome Mix por el otro... ¡pero nadie destaca la música orquestal! Y me parece especialmente relevante hacerlo, ya que muchos dicen que la única melodía efectiva de todo Marvel es el tema de 'Los Vengadores'. ¡Pues no! Yo salí del cine cantando la tonadita de los Guardianes, que por cierto, es parecida.

Mira esta escena. Solo con escuchar la música, sabrías cuándo los Guardianes han controlado la Gema... Pelos de punta.


No solo es la música... este final es catártico en más aspectos. No solo muestran su unidad, sino que son capaces de sostener y controlar la gema pese a que varios grupos ya lo intentaron anteriormente. Y, para colmo, Peter se quita la espina que lleva clavada con su madre desde hace décadas, y le da la mano de una forma metafórica. La canción, si te interesa, se llama 'Black Tears'.

Este momento, además, es seguido por la apertura del regalo, que es la forma que tiene Gunn de decirnos que, ahora que tiene una nueva familia, puede dejar por fin marchar a la anterior.

El milagro de los Guardianes.


No entiendo cómo esta película llegó a ser tan buena y tan exitosa. Me hago ideas, claro, pero no acabo de entender todos los aspectos individuales. Sé que Gunn apostó por hacer una película de personajes, y hacerlos muy característicos para ser recordados. También, la película es buena, y entra por los sentimientos, así que se ganó el corazón del público.

Pero, sinceramente, creo que la mayor clave es que a los Guardianes no les conocía ni su puta madre. Mis padres fueron a verla al cine porque pensaban que era una peli nueva que habían sacado, y no tenía nada que ver con Marvel ni su universo. No tener que ver con nada anterior ayuda a que cualquiera pueda entenderla.


Y por supuesto, no quisiera ser demasiado cínico, pero precisamente por ser los Guardianes demasiado desconocidos, los fans de los cómics no dieron por culo. Hubo cambio respecto a los orígenes de los personajes (acertados), se tomaron algunas licencias, y nadie se molestó porque nadie leía esos cómics. ¿A que sí hubo gente que se molestó con los cambios que hicieron en la segunda?


El fan cerrado medio de los cómics no entiende de cine, y solo quiere acción barata y una adaptación exageradamente fiel, nada más. No es un público objetivamente inteligente, y encima, sí es un público objetivamente molesto. En cuanto algo no sale como ellos quieren, se enfadan, porque son unas perras lloronas.
"AAAAY PINCHE GÜEEYYYY LA ERA DE ULTRÓN DEBIÓ LLAMARSE 'REIG OF AULTROOUN' PORQUE DE ERA NO TIENE NAAAA FUERON DOS DÍAAAS".
 Así que me alegro de que esta película tuviera éxito, y me alegro también de tener una página para mí solo, en la que tenga voz para ponerla en su lugar. La primera de Guardianes no es mejor que la segunda, ni muchísimo menos. No solo eso, sino que la segunda la gana en absolutamente cualquier aspecto que te imagines.


Por lo demás, ¡vamos a acabar con una nota un poco más positiva! A ver, ¿cómo puedo alegrar a muchos de mis lectores después de haber rajado sobre los fans radicales? ¡Sí, tengo la solución! Esto debería arreglarlo todo.


¡Ale, ale, a comprar juguetes de Groot bailando en una maceta! Jajajaja... qué gilipollas soy. Muchos besitos de fresitos de mi parte, MMMMUÁA, y nos vemos mañana... en el TOP 4. ¿Quién será? ¡¿Quién?!


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